פרשת ויגשׁ
Ioséf y Biniamín en Mashíaj ben Ioséf y
Mashíaj ben David - Primera y segunda venida del Mashíaj
Iehudá tiene un gran afecto y cariño hacia Biniam (primer cap. de la parashá), y prefiere morir él que dejar morir a Biniamim.
Este fue el discurso de Iehudá (cap. 44). Él reconoce a Biniamin más no reconoce a Ioséf que lo tiene como inexistente hasta estos momentos. Cree, posiblemente, a los ojos de él, que como Ioséf quizá murió porque dijo él que Iaacóv su padre tenía dos hijos con Rajel "y un hermano suyo murió" (Bereshit 44.20), entonces sus sueños, según Iehudá y sus hermanos, fueron solamente el producto de la
imaginación.
Mientras tanto, estando ellos en Egipto, Ioséf capturó a Shimeón, hasta que todos ellos se arrepintieron de la tragedia que habían hecho con él. Sus oídos al escuchar la verdad sobre la identidad de Zafnát Panéaj, como Ioséf hijo de Iaacóv, fueron privados de la verdad, indicado por la ocultación de Shimeón, que significa "el que escucha".
Por un lado el mensaje de Ioséf a sus hermanos al separar a Shimeón, diciéndoles "shemá" "escuchen", "presten atención" a mi persona. Y por el lado contrario, el "escuchar" fue escondido de sus virtudes.
Según la narrativa de la Torá, Ioséf después de habérsele revelado a Biniamín, ocultó su copa predilecta en el saco de Biniamín donde se encontraba la comida de los hermanos. Cuando ellos partieron de Egipto para ir a casa, el guardia los alcanza, registran todos los sacos y encuentran la copa de Iosef en el saco de Biniamín. Son llevados de regreso a Egipto, y según la narrativa del Séfer Ha-Iashar (Libro de Iashar 53.32) Ioséf tomó a Biniamín y ocultándolo en un cuarto de la vista de Iehudá, cerró la puerta con llave. Y se escribe en este libro sacro "Entonces Ioséf parándose tomó a Biniamin y lo quitó de sus hermanos con violencia, y vino a la casa y cerró la puerta con llave, entonces Iosef ordenó a aquel que estaba sobre su casa que les anunciara a los hermanos: Ustedes váyanse en paz hacia su padre, he aquí que yo he tomado al hombre en cuyas manos fue encontrada mi copa".
Según la narrativa de la Torá, Iehudá no tuvo a Biniamín, sin antes reconocer que Zafnát Panéaj como Ioséf, el hermano que había sido vendido, y que les proveyó vida mediante el alimento.
Esto indica que el estrato de la manifestación del Mashíaj conocida como Mashíaj ben David (Mashíaj Reinante) simbolizado por Biniamín (lit. "situado a la diestra" – Tehilim 110.1) no vendrá hasta que el reino de Iehudá reconozca que la manifestación del mismo y único Mashíaj conocida como Mashíaj ben Ioséf (Siervo sufriente) vino a darle vida, así como Ioséf trajo vida a sus hermanos mediante el sustento: "para preservar la vida me envió Elohim delante de ustedes" (Bereshit 45.5)
Lo siguiente pertenece a la sección de Kol Hator listando 156 aspectos de Mashíaj ben Ioséf (primera manifestación del Mashiaj):
"Ioséf reconoció a sus hermanos, pero ellos no lo reconocieron a él -- Este es uno de los rasgos de Iosef no sólo en su propia generación, sino que en cada generación, es decir, que el Mashíaj ben Iosef reconoce a sus hermanos, pero ellos no lo reconocen a él. Esto es obra del Satán, quien oculta las características del Mashíaj ben Ioséf para que los pasos del Mashíaj no sean reconocidos y sean despreciados por nuestros muchos pecados. De lo contrario, nuestros problemas ya habrían terminado. Si Israel reconociera a Ioséf, esto es, las pisadas de ben Ioséf, el Mashíaj, que es la reunión de las diásporas, entonces todo Israel ya habría sido redimido con la completa redención." (Kol Hator, Capítulo II, Aspecto #39)
De una manera similar, pero con otras expresiones y similitudes, Mashíaj Ieshúa dijo a los Iehudím (judíos, pertenecientes a la tribu de Iehudá), "Les digo que desde ahora no me verán, hasta que digan: Bendito el que viene en el nombre de Adonái." (Matái 23.29)
En la boda judía, para que el novio se aproxime a la jupá, que es una canopia matrimonial sostenida en sus cuatro ángulos por cuatro palos o por miembros de la familia, y en donde se formaliza la alianza matrimonial, se dicen estas palabras: "Bendito el que viene". En el libro, "Made in Heaven" ("Hecho en el Cielo") escrito por un rabino ortodoxo para el Judaísmo, llamado Aryé Kaplán, explica que esta es una expresión idiomática que significa "bienvenido".
Ieshúa dice que no será visto hasta que Iehudá o el reino de Iehudá diga sobre él, "Bendito el que viene en el nombre de Adonái", esta es una expresión utilizada para recibir al novio en su boda. Ieshúa está diciendo que no será visto o no retornará hasta que lo reconozcan como el Mashíaj Rey y Señor soberano de todo Israel, hasta que sea recibido como el Señor y el esposo de toda la nación de Israel, hasta que su pueblo clame por él y su regreso. Porque según la narrativa de la Torá, Iehudá pudo tener a Biniamín que fue ocultado de su vista (Mashíaj ben David, retorno del Mashíaj) hasta que reconoció a Ioséf (Mashíaj ben Ioséf, cuando el Mashíaj vino por primera vez a morir y a dar vida mediante su sacrificio y resurreccón) y no antes.