פרשת לך־לך
Parashát Lej-lejá

 
En la Parashát Lej-lejá Dios se le aparece a Abram en una visión, y lo anima (15:1). Dios promete a Abram un hijo (15:4); y una posteridad excesivamente numerosa (15:5). Abram acredita la promesa, y su fe es contada por justicia (15:6). IHVH renueva la promesa de la tierra de Canaán a la posteridad de Abram (15:7). Abram habiendo creído requiere una señal de su cumplimiento (15:8). IHVH le ordena hacer una alianza por medio de un método antiguo utilizando cinco animales distintos y partiéndolos por la mitad haciendo un camino con las partes partidas (15:9); y Abram asi lo hizo (15:10, 11). Dios le revela a Abram la aflicción de su posteridad en Egipto, y la duración de la aflicción (15:12, 15:13). IHVH promete traerlos de vuelta a la tierra de Canaán con gran afluencia (15:14-16), renueva la alianza con Abram, y enlista las posesiones que serían entregadas a él y a su posteridad (15:18-21).

Durante la alianza que IHVH hacía con Abraham, IHVH le dijo a Abraham: "Sabe por cierto que tu simiente será forastera en una tierra no suya (y allí será esclavizada y será oprimida) cuatrocientos años." (Gn 15:13)

La tradición judía enseña que los hijos de Israel en realidad estuvieron bajo esclavitud doscientos diez años (210) ya que los números no encajan cuando se correlacionan los cuatrocientos treinta años con los números de las genealogías, de manera que la cuenta de los 400 años ellos la inician desde los patriarcas. Pero el libro de Éxodo dice que los hijos de Israel estuvieron bajo esclavitud en Egipto por 430 años y no los patriarcas. Este número de 430 años no debería de ser críticamente dudoso. Los 430 años tampoco deberían de reducirse a 215 por una interpolación arbitraria, como la que encontramos en la Septuaginta, ἡ δὲ κατοίκησις τῶν υἱῶν Ἰσραήλ ἥν κατῷκησαν (Códice de Alejandría αὐτοὶ καὶ οί πατέρες αὐτῶν) ἐν γῇ Αἰγύπτῳ καὶ ἐν γῇ Χαναάν, κ.τ.λ. Esta afirmación cronológica, la autenticidad de lo que se coloca más allá de toda duda, por Onquelos, la Siriaca, la Vulgata y otras versiones, no solo está en armonía con la predicción en Gn 15:13, donde el número redondeado de 400 es empleado en un estilo poético, sino también puede reconciliarse con las distintas listas genealógicas, si tan solo tenemos en consideración que las genealogías no siempre contienen una enumeración completa de todos los enlaces separados, sino que se omiten con bastante frecuencia enlaces intermedios de poca importancia en la historia, como puede observarse en la genealogía de Moshé y Aaron (Éx 6:18-20). Por ejemplo, el hecho que hubo más de cuatro generaciones mencionadas en Éx 6:16, entre Leví y Moshé, se sitúa más allá de toda duda, no solo por lo que se aporta en Éx 6:18-20, sino por la comparación con otras genealogías también. De esta misma manera, en Nm 26:29, en Éx 27:1, y en Jos 17:3, encontramos seis generaciones desde Iosef a Tzelofejad; en Rut 4:18 y 1Cró 2:5-6, también hay seis desde Iehudá hasta Najshón, el príncipe de la tribu de la época de Moshé; en 2 Cró 2:18 hay siete desde Iehudá hasta Betzaleel, el constructor del tabernáculo; y en 1 Cró 7:20, nueve o diez generaciones son dadas desde Iosef hasta Iehoshúa. Esta última genealogía muestra con bastante claridad la imposibilidad de la postura hallada en el Códice de Alejandría, que la esclavitud de los hijos de Israel en Egipto fue de 215 años o la de los rabinos (210 años); porque diez generaciones, contadas a los 40 años cada uno, se armoniza muy bien con los 430 años, pero ciertamente no con 215.

Los traductores alejandrinos han alterado el texto para adaptarlo a la genealogía de Moshé en Éx 6:16, al igual que las genealogías de los patriarcas en Gn 5 y 11. La postura sostenida por los Setenta se convirtió en la tradicional en la sinagoga, y Shaúl /Pablo la adoptó en la Carta a la Comunidad de Galacia (3:17), donde él recuenta el intervalo entre la promesa dada a Abraham y la entrega de la Torá como un lapso de 430 años.

Si los hijos de Israel estuvieron 430 años pero el Judaísmo rabínico dice que estuvieron 210 años, significa que ellos anulan en la cuenta de los años de su calendario 220 años, eso nos indica que si sumamos el resto de los años que ellos anulan a la cuenta de los años que ellos siguen (5783 – 2022 calendario gregoriano), que son 220 en total, nos colocaría en la fecha 6003, que sería una fecha aproximada a la que nos encontramos. 

La Posición Rabínica

La postura rabínica se apoya en lo que dice Rashí en su comentario sobre Éx 12:40 que dice, "es imposible decir que los hijos de Israel estuvieron 400 años en Egipto, porque Kehat abuelo de Moshé fue uno de aquellos que entraron con Iaaqov" (Gn 46:11). Según Rashí si uno hace la matemática sobre los años de Kehat, de su hijo Amram y los 80 años de Moshé en Egipto, no serán muchos, y añadiendo que Kehat vivió muchos de sus años antes de descender a Egipto, y muchos de los años de Amram están incluidos en los años de Kehat, y muchos de los años de Moshé están incluidos en los años de Amram, de este modo no se hallan 400 años contando desde su llegada a Egipto".

En respuesta a esta postura, el Éx 6:16-20 dice lo siguiente sobre Kehat que entró con Iaaqov a la tierra de Egipto (Gn 46:11):

Estos son los nombres de los hijos de Leví por sus linajes: Guershón, Kehat y Merari, y los años de la vida de Leví fueron ciento treinta y siete años. Los hijos de Guershón: Livní y Simeí, por sus familias. Y los hijos de Kehat: Amram, e Itzar, Hebrón y Uziel. Y los años de la vida de Kehat fueron ciento treinta y tres años. Y los hijos de Merari: Mahli y Musi. Estas son las familias de Leví según sus generaciones. Y Amram tomó por mujer a su tía Iojeved, la cual le dio a luz a Aharón y a Moshé. Y los años de la vida de Amram fueron ciento treinta y siete años. (Éx 6:16-20)

La genealogía llega a Levi; y no solo los nombres de sus tres hijos son dados sino la longitud de su vida es mencionada (6:16), también la de su hijo Kehat y su descendiente Amram, porque ellos fueron los padres de la tribu de Moshé y Aharon. Pero para refutar la postura de Rashí, el Amram mencionado en Éx 6:20 como el padre de Moshé, no puede ser la misma persona que el Amram que era hijo de Kehat (6:18), sino que debe de ser un descendiente posterior. Porque, a pesar que la similitud de los nombres parece favorecer la identidad de estas dos personas como la misma, si nos limitamos a mirar la genealogía que nos ocupa, una comparación de este pasaje con Nm 3:27-28 nos mostrara la imposibilidad de tal suposición (que son la misma persona). De acuerdo con Nm 3:27-28, los Kehitas (hijos de Kehat) se dividieron [en la época de Moshé] en cuatro sucursales, Amramitas, Itzharitas, Hebronitas, y Utzielitas, que en conjunto consistían de un total de 8600 hombres y niños (mujeres y niñas no estaban incluidas). De ellos, alrededor de una cuarta parte, o 2150 hombres, pertenecían a los Amramitas. Ahora, según Éx 18:3-4, Moshé mismo tuvo solamente dos hijos. En consecuencia, si Amram hijo de Kehat, y padre de la tribu de los Amramitas, era la misma persona que Amram padre de Moshé, Moshé tendría que haber tenido 2147 hermanos e hijos de los hermanos (las hijas de los hermanos, las hermanas y sus hijas, no eran contadas). Pero como esto es absolutamente imposible, debe de reconocerse que Amram el hijo de Kehat no era el mismo Amram el padre de Moshé, y que una lista de generaciones indefinidamente larga ha sido omitida entre el primer Amram y el segundo descendiente bajo el mismo nombre ("Amram padre de Moshé").

Encontramos un caso similar en la genealogía de Ezra en Esdras 7:3, que pasa por encima de Azaria hijo de Meriaot a Azaria hijo de Iojanán, y omite cinco enlaces entre estos dos, como es de observarse en 1 Cró 6:7-11. De la misma manera la genealogía en cuestión se salta desde Amram hijo de Kehat y Amram padre Moshé sin mencionar las generaciones de por medio.

En conclusión el año más cercano en el cual podríamos encontrarnos es el año 6003 (este 2022 del calendario gregoriano), posiblemente hay unos años de error, no lo sabemos, pero si sabemos que estamos a punto de entrar al años 6000 y el retorno de Marán Ieshúa está muy cerca.