La revelación de Ieshúa el Mesías, que Dios le dio, para manifestar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; y la declaró enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan. (Ap 1.1 versión Reina Valera 1960)
El objeto de la oración no es la "Revelación". Este libro es sobre la Revelación de Ieshúa. Por una mala compresión de este texto, la frase la Revelación de Ieshúa...etc, se ha tomado en el sentido de una revelación comunicada por Dios al Mesías y por el Mesías a Juan. En realidad, se trata de una revelación que tiene por objeto al mismo Mesías. Ieshúa es el centro de todo el Apocalipsis. Toda la revelación comunicada a Juan gira en torno a la revelación, identidad y manifestación del regreso de Ieshúa al mundo para reinar sobre Israel y el mundo. Y el contenido de esta revelación sobre Ieshúa es lo que ha de suceder pronto (v. 1), es decir, los juicios de Dios sobre el mundo, su manifestación y venida.
El texto griego de este versículo indica que lo que se está revelando es a Ieshúa mismo, el texto no indica que Ieshúa haya recibido algún tipo de revelación de parte de Dios. De aquí que el libro inicia diciendo, "La Revelación de Ieshúa el Mesías". El nombre no es el que está en genitivo, sino la expresión. Y que está en genitivo, es indiscutible. Lo que se discute es qué tipo de genitivo es: genitivo objetivo o genitivo subjetivo. Mi propuesta, y como la es de muchos eruditos, es que es un genitivo objetivo, es decir, cuando dice, "La Revelación de Jesucristo", la palabra "de" al ser genitivo objetivo, significa "acerca de", es decir, "La revelación acerca de Jesucristo". En las 12 veces que se usa este genitivo en todo el Nuevo Testamento, 10 veces aparece como un genitivo objetivo, y 2 veces como un genitivo subjetivo.
Ya algunos, como los autores de la biblia Nacar, comprendieron que la correcta traducción es la siguiente: "La Revelación de (acerca de) Jesucristo, que ha dado Dios, para instruir a sus siervos sobre las cosas que han de suceder pronto, por su ángel a su siervo Juan". O como otra traducción que sugiere, en donde las tildes toman importancia, dice: "La Revelación sobre Jesucristo, que Dios le dio, para manifestar a sus siervos sobre las cosas que han de suceder pronto declarándola por medio de su ángel, a su siervo Juan"."
Es decir, el objeto de la oración, la persona revelada, es Ieshúa, y és él y sobre él, la revelación que Dios le dio (a Juan), por medio de su ángel.
El texto griego de este versículo indica que lo que se está revelando es a Ieshúa mismo, el texto no indica que Ieshúa haya recibido algún tipo de revelación de parte de Dios. De aquí que el libro inicia diciendo, "La Revelación de Ieshúa el Mesías". El nombre no es el que está en genitivo, sino la expresión. Y que está en genitivo, es indiscutible. Lo que se discute es qué tipo de genitivo es: genitivo objetivo o genitivo subjetivo. Mi propuesta, y como la es de muchos eruditos, es que es un genitivo objetivo, es decir, cuando dice, "La Revelación de Jesucristo", la palabra "de" al ser genitivo objetivo, significa "acerca de", es decir, "La revelación acerca de Jesucristo". En las 12 veces que se usa este genitivo en todo el Nuevo Testamento, 10 veces aparece como un genitivo objetivo, y 2 veces como un genitivo subjetivo.
Ya algunos, como los autores de la biblia Nacar, comprendieron que la correcta traducción es la siguiente: "La Revelación de (acerca de) Jesucristo, que ha dado Dios, para instruir a sus siervos sobre las cosas que han de suceder pronto, por su ángel a su siervo Juan". O como otra traducción que sugiere, en donde las tildes toman importancia, dice: "La Revelación sobre Jesucristo, que Dios le dio, para manifestar a sus siervos sobre las cosas que han de suceder pronto declarándola por medio de su ángel, a su siervo Juan"."
Es decir, el objeto de la oración, la persona revelada, es Ieshúa, y és él y sobre él, la revelación que Dios le dio (a Juan), por medio de su ángel.